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Si notais que llevo mucho tiempo sin escribir, posiblemente me esté pasando la mismo que le ocurrió a García Birlán.
"El deber me ordena que os dedique esta crónica y la pluma se niega a escribirla. Se amontonan las notas en mi imaginación y la péñola no sabe darles forma. Esfuerzo el pensamiento, concibo ideas, bullen las palabras en la mente y aun permanecen blancas las cuartillas."

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¿Un cateto escribio esto?:

Esta cárcel que, durante varios meses, le dio ocasión de un trato prolongado con el mundo variopinto del hampa, verdadera sociedad paralela con su jerarquía, sus reglas y su jerga, parece ser, con mayor probabilidad que la de Castro del Río , la misma donde se engendró el Quijote, si hemos de creer lo que nos dice su autor en el prólogo a la Primera parte: una cárcel «donde toda incomodidad tiene su asiento y donde todo triste ruido hace su habitación», y en la cual bien pudo ver surgir, al menos, la idea primera del libro que ocho años más tarde le valdría una tardía consagración.

Cervantes en su vivir .

Jean Canavaggio

sábado, 5 de noviembre de 2011

Don Manuel Lorenzo Oterino.


Hace poco en el blog de la Vera Cruz  http://veracruzlaprimera.blogspot.com/  cruzaba información con un asiduo participante en la parte utilizada para los comentarios de las entradas; en este caso se comentaba una foto de un paso de esta hermandad realizada en la calle Alta, a la altura del edificio donde hoy se encuentra una oficina bancaria de origen Catalán.


En la fachada de esta casa podemos observar un escudo de piedra de una gran belleza.

Este interesante escudo me había llevado hace muchos años a indagar su procedencia, poco o nada recopilé sobre éste, tan solo del propietario de la casa. Un militar con alta graduación, su nombre y poco más.

Ha sido la discusión de si era bilaureado o trilaureado la que me ha llevado a investigar sobre éste señor.

No debo de olvidar que aunque interesado por la historia local desde muy temprana edad, no era esta época la que más me apasionaba. Dada la sequía tan prolongada de la fuente de donde bebía para calmar mi sed arqueológica, la prohibición de artefactos de búsqueda de acuíferos y la persecución tan barbara de todos los que se asoman a estas aguas; que para nada tienen porque ser turbias. Esto y la facilidad que hoy encontramos en la red para investigar cualquier periodo de la historia me hacen desplazarme por tiempos que cada vez me resultan más atractivos.

Es tanta la información e interesante que he encontrado de este señor, que he decidido mostrarlas en varias entradas.

Momentos como el episodio vivido en Cuba por este militar, me llevo a pensar que pudo haber llegado a esta localidad desterrado al estilo de  Bartolomé Gallardo. http://decastroero.blogspot.com/2011/10/entre-garamantas-fieros-sobre-la.html.



La historia de los pueblos está basada en los hechos acaecidos, su patrimonio material, los personajes allí nacidos y también por los que murieron sin ser oriundos.




6 comentarios:

ALBERTO GAY HEREDIA dijo...

Efectivamente amigo Diego, el General Don Manuel Lorenzo Oterino, natural de Salamanca, se destacó en la defensa de la causa liberal y de la Reina. Será durante la primera guerra carlista cuando nutre considerablemente su pecho de medallas y condecoraciones por sus destacadas intervenciones en la lucha contra las facciones carlistas. Los últimos años de su vida fueron de residencia voluntaria en Castro del Río, pues ya habían cesado las persecuciones contra los liberales.
Tengo una carpeta con informaciones sobre él, reservada para una futura entrada. Pero como aprecio que no has querido entrar en profundidades me gustaría que me hicieses saber si tienes pensado volver a ocuparte del tema.
Gracias.

Diego Luis Urbano Mármol dijo...

Amigo Alberto, como bién dices, existe "bastante" información, sobre él.
Como he dicho en esta entrada tengo pensado escribir algo más. Máxime cuando las lineas de investigación se amplían en mi trabajo de campo, ya que éste está enterrado en el mismo nicho que un brigadier. Y no es su hijo.

Manuel dijo...

Cuanto información fluye de cualquier tema cuando que embulles en él. Me resulta interesante D. Diego. Ánimo para las próximas entregas. Se esperan con impaciencia

Un saludo

ALBERTO GAY HEREDIA dijo...

Pues nada Diego para ti el insigne militar. Espero que no nos defraudes y que te queden esas entradas tan bien plantás como las paellas con las que se retrata tu amigo el chamarín.

Anónimo dijo...

Se conocen los nombres de sus hijos?

JLIS dijo...

Tres de los hijos de Manuel Lorenzo Oterino fueron militares. Estos son unos breves resúmenes de sus vidas:
ELISEO LORENZO ARCAYA
Nació el 7 de febrero de 1830 en las Islas Baleares. A los catorce años ingresó como cadete en el Ejército. Era hijo de Ana de Arcaya, esposa del Laureado teniente general Manuel Lorenzo Oterino, y sobrino del también Laureado Manuel María de Arcaya y Manzanos.
Con el empleo de subteniente solicitó la licencia absoluta en 1844, concediéndosele en 1848 la vuelta al servicio.
En 1855 alcanzó el empleo de teniente y fue destinado al Batallón de Cazadores de Vergara. Destinado al Ejército de la Isla de Cuba, ocupó vacante de capitán en el Batallón de Cazadores núm. 2, del que más tarde pasó a servir en el Cuerpo de Ingenieros y de aquí al Regimiento de La Habana.
En 1865 regresó a la Península, donde fue destinado al Batallón de Cazadores de Los Arapiles.
En 1868 se le concedió el empleo de comandante por gracia general, y destino en el Regimiento de Mallorca, desde el que en 1872 volvió a solicitar el pase al Ejército de la Isla de Cuba con el empleo superior, que le fue concedido, siendo destinado al mando del Batallón de Movilizados de Matanzas.
Ascendido a coronel, se le dio en Cuba el mando del Regimiento de la Corona. De vuelta a la Península, en 1880 se le confió la 7ª Media Brigada de Cazadores y seguidamente del Regimien¬to de León.
Se retiró con el empleo de coronel. En 1894 fue nombrado presidente del Centro General de Pasivos.
Fue recompensado con una Cruz de 1ª clase de la Real y Militar Orden de San Fernando.

MANUEL LORENZO ARCAYA
Ingresó en el Ejército en 1824. Era hijo de Ana de Arcaya, esposa del Laureado teniente general Manuel Lorenzo Oterino, y sobrino del también Laureado Manuel María de Arcaya y Manzanos.
En 1841 fue ascendido a capitán y destinado al Regimiento del Rey, en el que en 1853 fue ascendido a comandante y destinado a las inmediatas órdenes del capitán general de Cuba.
Ascendido a coronel en 1860, sirvió en el Ejército de Filipinas al frente de la 4ª Media Brigada y más tarde de la 2ª. En 1868 se le dio el mando de una columna para operar en Ilocos y seguidamente obtuvo el mando de la 3ª Media Brigada. Siendo comandante general de las Partidas de Luzón, pasó a desempeñar en 1870 el cargo de gobernador político militar de Cavite.
Falleció en 1872. Estuvo casado con María del Rosario Dayor Oglice.
Ganó una Cruz de San Fernando de 1ª clase por su actuación durante la Segunda Guerra Carlista.

VÍCTOR LORENZO ARCAYA
Nació en 1826 y a los doce años se le concedió la gracia de cadete. Era hijo de Ana de Arcaya, esposa del Laureado teniente general Manuel Lorenzo Oterino, y sobrino del también Laureado Manuel María de Arcaya y Manzanos.
En 1852, siendo teniente, sirvió en el Regimiento de León, alcanzando dos años después el ascenso a capitán, con el que más tarde pasó al Batallón Provincial de Burgos y al Batallón de Cazadores de Vergara, en Burgos.
Intervino en la Guerra de África de 1859-1860 formando parte del Regimiento de Zamora núm. 8, ganando la Cruz de San Fernando de 1ª clase por los combates de los días 15, 17, 20, 22 y 25 de diciembre de 1859.
En 1864 alcanzó el empleo de comandante y fue destinado al Regimiento de Zaragoza.